EL APARTADO DE LA OVEJAS.
La verea no finaliza cuando se llega, si no cuando se apartan las ovejas en diferentes hatos y se reparten por la dehesa. Al principio, había unas 1.300 ovejas que estaban en los Campos de Hernán Pelea, justo en el paraje de la Loma de la Paja, la mayoría de estas ovejas estaban preñadas desde el mes de Octubre. Desde este paraje se inició el primer tramo de la verea hasta las instalaciones de los hermanos “Los Carlillos”, en el Castillico de la Matea, allí se reunieron con otro hato de unos 700 animales.
En toda la verea hasta el Porrosillo, las ovejas iban formando un solo hato, además de un grupo de cabras, mansos, los perros, dos yeguas, los hermanos Garcia Rico “Los Carlillos” y el que subscribe.
El primer día después de la llegada, se reúnen las ovejas en una tiná con varias naves y allí se procede, siguiendo una tradición familiar heredada de su padre, a separar o apartar los animales en diferentes hatos o grupos. Las preñadas por un sitio, por otro, a las que se le echarán los borregos luego en marzo para que paran en Septiembre, y así se van haciendo los hatos durante toda la mañana y bien entrada la tarde, para que al final del día se lleven cada hato al lugar en el que permanecerán hasta el regreso allá por el mes de Mayo ¡Todo un arte!.
El video dura unos 13´ tiene su parte sería, pero sobre el 9,30´tambien su parte graciosa protagonizada por el enamoramiento de un macho y una cabra negra. Lo mejor casi al final: Daniel con su método de contar ¡tecnología punta en la era digital!, pero que no falla (el detalle los explicare en mi blog).
He visto los videos que has puesto sobre la verea. Algo que desconocía. Más de una vez en mis salidas me he encontrado con rebaños de ovejas pero nunca tan grandes como éstos que muestras. Un "mundo" que desconocía y que gracias a tus entradas me he podido dar cuenta de lo difícil y complejo que es todo ésto. Enhorabuena por tu trabajo y un saludo a tus amigos, muy buena gente, sin duda.
ResponderEliminarRosa, muchas gracias por tu comentario. Siempre hemos tenido, al menos yo, la profesión de pastor poco valorada, pero después de haber compartido con ellos la verea, mi opinión ha cambiado radicalmente, y compartiendo tus palabras me he dado cuenta lo difícil y complejo que es su trabajo, además de los conocimientos que acumulan. Un saludo. Miguel Mesa.
Eliminar