EL LEGADO
DEL PINTOR RUFINO MARTOS.
(1912-1993).
A raíz de una información aparecida en el
diario Jaén titulada: Rufino Martos podría salir de Segura – (ARTICULO DIARIO JAEN), al ser amigo de Juan
Martos de la Casa, responsable del legado del PINTOR RUFINO MARTOS, por
más señas hijo del pintor, y al tenerle cariño y apego a este pueblo de Segura
de la Sierra, me he puesto mano a la obra con esta nueva entrada en mi blog. Pretendo
tan solo poner mi pequeño grano de arena para: divulgar su obra, reconocer la labor que está haciendo Juan Martos en dar
a conocer la figura de su padre, pintor de Jaén del siglo XX, así como el
legado que nos dejó, y que se conozca
más aún su obra dentro de mis pequeñas posibilidades.
Sé por experiencia que la gente de Jaén
somos bastante indiferentes y apáticos hacia los tesoros que tenemos en nuestra
provincia, valorando poco a nuestros paisanos; resaltamos a otras personas ajenas a nuestro entorno descuidando lo que
tenemos, y, cuando queremos darnos cuenta, las cosas ya no tienen arreglo y nos
lamentamos. Por desgracia, a día de hoy, la obra del pintor Rufino Martos ya no
está en Segura, cumpliéndose los peores augurios.
¿QUIÉN FUE RUFINO MARTOS ORTIZ?
El pintor Miguel Viribay Abad, con motivo del fallecimiento de D. Rufino Martos el 3 de junio del año 1993 en la ciudad de Córdoba, publicaba en el Diario Jaén un artículo con su vida y obra, que transcribo literalmente ……..
Fue el pintor del paisaje jiennense
El
pintor jiennense Rufino Martos falleció en Córdoba el
pasado día 3 de junio a los 81 años de edad, víctima de una grave enfermedad.
Rufino Martos pasó muchos años de su vida en la capital de la Mezquita como
profesor de la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos y su funeral se
celebró el pasado viernes en la cordobesa parroquia de Santa María Madre de la
Iglesia.
Había
comenzado sus estudios de pintura en la Escuela de Artes y Oficios de Jaén
donde recibió consejos del pintor catalán José Nogué, que desde el primer
advirtió las excelentes dotes de aquel joven mocetón, de rudas formas y acusada
sensibilidad para el arte. Nogué puso en marcha rápidamente sus resortes de
avisado profesor y su influyente personalidad para buscarle al principiante
padrino en la ciudad. Los primeros datos escritos sobre Rufino Martos que yo
conozca aparecen en 1933. En ellos se refleja la expectativa que se abría entre
las personas más influyentes de Jaén en torno a la pintura de aquél muchacho,
cuyos primeros años habían transcurrido en las faenas de la huerta que su
familia regentaba, labores agrícolas realizadas en los alrededores de la ciudad
y desde ahí su primer contacto con el paisaje contemplado con el amor de lo
propio.
Rufino
enseguida recibió el apoyo de la Diputación Provincial que le concedió una beca
que, luego, se le fue prolongando por distintos conceptos, desde el curso
1933-34, hasta el de 1944-45, cuando concluyó su carrera de pintor en la
Escuela Superior de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Allí, el pintor se
hizo acreedor rápidamente del respeto y la admiración de algunos profesores de
valía; y, por oposición, consiguió distintas consideraciones, entre ellas la
codiciada Beca del Paular, que generalmente se concedía al mejor alumno de la
disciplina de Paisaje mediante la consabida oposición.
Como
profesor, Rufino Martos ejerció primero en la Escuela de Artes y Oficios de Jaén,
más tarde, tras ganar unas reñidas oposiciones, en la de Palencia, y
posteriormente en la de Córdoba a la que llegó entrada ya la década de los
cincuenta y en la que permaneció y desarrolló la mayor parte de su carrera
docente, hasta su jubilación.
SU OBRA.
No
soy ningún erudito ni experto en pintura, y poder criticar un cuadro de
cualquier pintor ¡ni por asombro!, eso sí, cuando he contemplado algún cuadro de
Rufino Martos, he sentido una sensación especial, porque están llenos de calidez
lograda con los contrates de colores calientes
y fríos.
F1)
TITULO: CORTIJO AL AMANECER
En conversación con
su hijo Juan Martos en su estudio se Segura de la Sierra, (para quien no lo
conozca: Ingeniero Técnico en Quimica y Licenciado en Bellas Artes, pintor y
ceramista) me decía que la pintura son “luces y sombras” y que para muchos artista, las formas no suponen parte
de su inquietud a la hora de pintar. Su padre supo plasmar en sus dibujos:
luces, sombras y profundidad, de una forma genial.
F2) TITULO: SIERRA DE SEGURA
Continuaba
la conversación diciendo que para aprender el oficio, hay que tener escuela, lo
que implica muchas “escayolas”, es decir: dibujar sobre papel enfoques diversos
de piezas en escayola o de desnudos
utilizando: carboncillo, acuarela, pastel, sanguina o grafito; y terminaba comentando
que el pintor debe tener su estilo propio que lo defina sobre los demás. Como
anécdota, decía que en cierta ocasión
entró por casualidad en una sala en el Ayuntamiento de Hornos, y al contemplar un cuadro que colgaba de la pared,
exclamó “este es de mi padre”, lo reconoció por el estilo que tenía.
Aunque
en Segura, tal como he comentado al principio,
el local donde se encuentra parte del legado no permanece abierto al
público, he podido recoger algunos rincones con obras del artista, que por su belleza y sencillez, me han
cautivado y que quiero compartir:
F3) EXPOSITOR CON DIVERSOS OBJETOS PERSONALES
DEL PINTOR.
F4)
AUTORRETRATOS DEL PINTOR RUFINO MARTOS Y DE SU ESPOSA
DÑA. JOAQUINA DE LA CASA.
F5
y F6) PARAMENTO VERTICAL CON AZULEJOS DE CERÁMICA REALIZADOS POR JUAN MARTOS SOBRE
UN CUADRO DE SU PADRE (SE APRECIA EN EL CENTRO UN DIBUJO DE LA CATEDRAL DE JAÉN
y LA SENDA DE LOS HUERTOS).
F7
Y F8) RINCÓN CON DOS CUADROS: VISTA DEL CASTILLO DE SANTA CATALINA DE JAÉN Y UN BODEGÓN.
Fuente mural
Capialzado en puerta de
tránsito.
F9
Y F10) DETALLES DE COMPOSICIONES CON AZULEJOS EN CERÁMICA
DE JUAN MARTOS.
F11)
DIFERENTES UTENSILIOS DE USO DOMESTICO MODELADOS EN BARRO, PINTADOS A MANO Y
COCIDOS EN HORNO EN EL TALLER, POR
JUAN MARTOS.
DIFERENTES CUADROS DE LA OBRA DE
RUFINO MARTOS.
Su
obra puede apreciarse entre otros lugares: en la Real Academia de Bellas Artes
de S. Fernando en Madrid, en el Museo Provincial de Jaén, en el Ayto. de Jaén y en la
sala de exposiciones del taller de Juan Martos en Segura de la Sierra.
Cuadros en la sala
de exposiciones de Segura De La Sierra.
F12) TÍTULO: PLAZA DE SEGURA (ESCENA COSTUMBRISTA).
F13)
TÍTULO: RINCÓN DE SEGURA.
F14)
TÍTULO: ESCENA COSTUMBRISTA.
F15) TÍTULO: CASERÍO DE LA SIERRA DE SEGURA.
F16)
TÍTULO: PUEBLO.
F17)
TÍTULO: CAMPIÑA Y OLIVOS DE MALLORCA.
F18)
TÍTULO: CAMPIÑA Y OLIVOS DE MALLORCA.
F19)
TÍTULO: HORREO
NOCTURNOS:
F20) TÍTULO: SEGURA.
F21)
TÍTULO: JAÉN Y CATEDRAL.
F22)
TÍTULO: IGLESIA DE UBEDA YA DESAPARECIDA.
F23)
TÍTULO: RINCÓN DE SEGURA.
Cuadro en
el Museo Provincial de Jaén.
F24) TITULO: “CASTILLO DE HORNOS" OLEO SIL: 98 X 145 CM.
"CASTILLO DE
HORNOS"
Figura con el número de inventario 457,
está reproducido en un modesto
catálogo del museo firmado por Juan González Navarrete, y fue hermoso pretexto para la conferencia de M. Ruiz
Calvente en "Los Jueves del Museo" correspondientes al año 1992,
fichan!! 13. Pertenece a ese particular universo del Rufino paisajista y recoge
una amplia panorámica de Hornos de
Segura desde la carretera que conduce a Santiago de la Espada. Paisaje casi
aéreo, de horizonte alto donde afirma el caserío sobre una
peña y encima la torre
de la iglesia y la fortaleza
medieval se advierten netas ante la mirada, la anterior rodeadas por el verdor
de alejados pinares, ésta, en su parte más elevada, sobre un nubarrón otoñal. Lugar alejado de Jaén,
largo de términos que el artista supo fijar con notarial y, sin embargo, nada mezquina
dicción. No hay en el cuadro tufo alguno de blandura estética. Con pinceladas
briosas y decididas Rufino traslada el cálido paisaje a una tela de lino
preparada por él. Es cierto que el bastidor está montado al revés, esto es: con las aristas
romas hacia la parte opuesta a la tela,
por lo que no cumplen la función que les está encomendada. El pintor supo poner
papel de periódico, sobre la parte de bastidor que pega al lienzo, a fin de
asegurar que éste no se pegase a la madera durante el proceso de preparación.
Ello garantiza el tratamiento de la tela sobre el bastidor que la soporta. Su
preparación: una media creta, ligeramente absorbente, que ayuda a conservar, con bastante fidelidad, el
verdadero gesto de la pincelada. Un gesto que a este artista siempre le ha
interesado conservar en sus obras.
Apenas hay
superposiciones matéricas en la tela. Las azuladas y violáceas sombras que la
tarde comienza a alargar sobre el
paisaje están atendidas con un proceso de transparencias que deja ver el
entramado de un lienzo de medio grano. El proceso de restregones y ligeros
aguarrasados se impone en la superficie, luego unas concreciones con media
pasta y, finalmente, la decidida afirmación de las formas más significativas
con pinceladas muy marcadas. Todo el paisaje está explicado
con sencillez. Después de un primer término en transparente sombra, un
suelo abundoso de ocres nos acerca hasta el caserío de blancas cales que
avivan el anaranjado sol de la
tarde sobre las construcciones más
nobles del singular conjunto
urbanístico, cuyas sombras, igual que el vertical corte de la roca, las
concreta la cálida sensación de una tierra de Sevilla, mientras la quietud de los verdes ponen la nota sosegada en la frondosa lejanía. Todo bajo un cielo que amenaza
tormenta con azules que se hacen negros y ponen la nota grave del paisaje
pintado sobre un formato escasamente usual en la obra de este sobrio y ejemplar
pintor de Jaén.
Miguel VIRIBAY
F25) UBICACIÓN DEL ÓLEO "CASTILLO DE HORNOS" EN LA
SALA DEDICADA A LOS PINTORES DE JAEN EN EL MUSEO PROVINCIAL. AL FONDO A LA
IZQUIERDA, BODEGÓN DEL PINTOR CEREZO MORENO, HIJO ADOPTIVO DE SEGURA DE LA
SIERRA.
En
la ciudad de Jaén, tiene una calle dedicada a su nombre en el populoso barrio
de Peñamefecit.
Esperemos
que su legado tenga un sitio digno en algún punto de nuestra provincia, para
disfrute y deleite de todos sus paisanos, y también si fuera posible una sala dedicada a su
figura en el Museo Provincial de Jaén.
Jaén,
Agosto 2016.
Bibliografía:
- Internet.
- Diario Jaén.
- Fotos, textos, diapositiva y maquetación: Miguel Mesa Molinos.
- Agradeciendo a: María del Carmen Guirado de Dios por su desinteresada colaboración y a Juan Martos de la Casa, pintor y ceramista.