Artículo DIARIO JAÉN en el cuadernillo "La Semana": UN DÍA DE ESQUILO EN EL MONTE DEL NEVERAL.
Por lo general cuando hablamos del trabajo, diría mejor ¡del trajín! que día a día tienen los pastores y ganaderos, sobre todo del ganado ovino, dirigimos nuestros pensamientos a la Sierra de Segura, como es mi caso, obviando a los que tenemos más cerca, p.e.j. en los montes próximos al núcleo urbano de Jaén.
01 - Territorio de pastos en el TM de Jaén.
02 - El castillo con pastores.
José Nogué. Pintura al óleo
(1921).
Museo Provincial de Jaén.
Hemos hablado hasta el
momento de un territorio en el suroeste de Jaén capital que pertenece a su
término municipal, ovejas de la raza Montesina y de un pastor, y en el
enunciado un título con la palabra “esquilo”. Y, ¿cómo se relacionan todos
estos términos entre sí?
-
El territorio
Lo forman los montes de: La Inmora, El Neveral, El parque periurbano de Santa Catalina, y Jabalcuz; todos ellos de sobra conocidos por los jienenses.
En este territorio existe una gran cantidad de pinos y vegetación forestal, que requieren actuaciones anuales para la prevención de incendios forestales.
Estas actuaciones se vienen ejecutando por la “Consejería Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible”, consistente en la eliminación de residuos con medios mecánicos mediante astillado en densidad baja, en zonas muy concretas del monte, actuando por lo general en unos 25 metros de ancho y perimetralmente a cada lado de las pistas forestales de acceso en el monte.
En otras ocasiones, las menos por su coste, entresacan pinos que aprovechan para biomasa (pellets), madera para la fabricación de tableros y serrín para la fabricación de tableros de aglomerado.
-
Las ovejas de raza Montesina
Y a la pregunta: ¿Y en el resto del monte qué se hace para la prevención de incendios?
Aquí aparecen unos animales que son piezas fundamentales en la prevención de los incendios: ¡Las ovejas!, llamadas cariñosamente: “Las ovejas bomberas”.
Hay que resaltar que estos montes pertenecen al termino municipal de Jaén capital; su ayuntamiento saca a concurso público el aprovechamiento de los pastos de este territorio, con la premisa, entre otras, que los animales estén todo el año pactando por estos montes con el fin de limpiarlos de la vegetación forestal. En la actualidad el adjudicatario de este concurso es el ganadero D. Manuel Torres Guerrero, natural de Jaén, con una larga experiencia como pastor, teniendo un hato de unas 600 ovejas de raza Montesina, además de dos perros careas de la raza Colín y un perro Mastín.
Aunque las ovejas, la mayor parte del año están a “careo” por los montes, existen unas instalaciones fijas propiedad del Ayuntamiento de Jaén (dos cobertizos, más un amplio corral cercado) que se utilizan como abrigo para la paridera, el esquilo, como almacén de pienso y paja para los animales, para los depósitos de agua que se alimentan de una fuente próxima en el cerro... a todo el conjunto se le conoce como “La Tiná”.
05 – Vista del corral, al fondo el monte de la Mella.
Otra pregunta ¿Por qué las
ovejas son de la raza Montesina? Para
esta pregunta lo mejor es detallar las características de la raza
Montesina.
La oveja de raza Montesina.
La oveja de raza Montesina, conocida como Sevillana, o Granadina, es una raza autóctona andaluza en peligro de extinción, originaria de los Montes de Granada, enclavada principalmente en áreas protegidas (Sierra Mágina y Sierra Morena).
En la década de los 80 era una raza que contaba con unos 300.000 ejemplares, pero la introducción de razas foráneas y el cruzamiento fue relegando a la oveja Montesina al olvido hasta llegar a un inquietante número de 1.366 ejemplares que criaban en pureza.
La “Asociación Nacional de Criadores de Oveja Montesina”, reconocida por la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía el 17 de marzo de 2003, nos presenta las características más importantes de esta raza, entresacando de su página web lo que sigue:” …
-
Características productivas
De las razas ovinas
españolas, la Montesina es la que se asienta en un nicho ecológico más
árido; por lo tanto, con pocos recursos pastables a lo largo de gran parte del
año. Las producciones de esta raza, por tanto, están íntimamente ligadas
a las estaciones; es decir, gran cantidad de rebaños solo tienen partos
coincidiendo con la primavera, cuando los recursos pastables son más
abundantes.
La raza Montesina es
de aptitud eminentemente cárnica, siendo sus otras producciones (leche y
lana), meramente anecdóticas.
- Morfología
06 - Grupo de ovejas Montesinas esperando para el esquilo.
En la foto 05) se
puede observar en su cabeza y orejas, las manchas negras centrífugas de extensión
inconstante.
Cabeza. De tamaño medio
en armonía con el volumen del cuerpo, desprovista de lana. Sin cuernos en
general en ambos sexos, aunque se presenta con relativa frecuencia en machos y
en alguna explotación aislada en las hembras. De línea frontonasal subconvexa a
convexa en las hembras, siendo la convexidad más acentuada en los machos.
Orejas de medio a gran tamaño de implantación horizontal o ligeramente caídas.
Orbitas redondas con gotera lacrimal. Hocico acuminado con labio muy fino y
vivaz.
Cuello. Largo y
delgado, sin pliegues ni expresión de papada. Con o sin mamellas.
Tronco. Alargado y
robusto. Cruz ligeramente destacada. Línea dorso-lumbar recta. Grupa amplia y
con ligera inclinación. Tórax redondeado. Pecho ancho y redondeado. Vientre
recogido.
Mamas. De igual tamaño
en sus dos partes, globosas y desprovistas de lana.
Testículos. Simétricos de
tamaño y situación, con la piel de las bolsas totalmente deslanada. Se acepta
el horquillado.
Extremidades. Con aplomos
fuertes, robustos, de articulaciones netas y carpos, tarsos y radios distales
limpios, con pezuñas simétricas, duras y resistentes. Espalda bien unida al
tronco. Nalgas y muslos con perfil subconvexo.
Piel y
mucosas. Piel semigruesa, azulada, sin arrugas ni pliegues,
con las zonas desprovistas de lana cubiertas de pelo. Fundamentales son
las manchas negras centrífugas de extensión inconstante pero siempre presentes.
Afectan a la punta de las orejas hasta tres cuartas partes de las mismas,
alrededor de los ojos con extensión hacia la boca en muchos casos, labios, y
con menos frecuencia a las partes distales de las extremidades y a la región
genitourinaria; si aparecen mamellas también suelen ser negras.
Vellón. Semicerrado,
extendido al tronco, cuello y regiones superiores de los miembros. Deja al descubierto
la cabeza, vientre y radios distales de las extremidades y, frecuentemente, el
borde traqueal…”
A
tenor de lo expuesto y al hilo de la raza
Montesina, en la feria ganadera de razas andaluzas que se celebra en Huelma,
“Expohuelma”, se lleva a cabo un Concurso Morfológico Nacional de la Oveja
Montesina, en dónde se pueden ver magníficos ejemplares procedentes de
Valdepeñas de Jaén, Pegalajar, Alicún de Ortega (GR), Jaén, Fuensanta de
Martos, Pedro Martínez (GR), Otíñar, Mancha Real, Alamedilla (GR)...
Pues
bien, y como anécdota, en su última edición a la que asistí antes de la
pandemia, me acerqué a un “rincón ganadero” más que nada para aprender, dónde
había un grupo de personas mayores, todos ganaderos y pastores que hablaban
sobre las diferentes razas de ovejas que allí había…… Uno decía que la
Montesina no sirve para estar en la sierra y que hay que darle de comer, que si
no se muere; Otro apuntaba diciendo, con un lenguaje muy peculiar, que esta
raza era “fría” (¿?), y que cuando parían el borreguete, le decían al pastor: “Tú
te la apañas que yo ya he cumplido” Pues bien, todo esto tiene una certeza
relativa, pues si la oveja que pare esta “seca”, vamos delgada, pasa de criar
al borreguete, y es el pastor quien tiene que salir al frente, pero si la madre
esta “gorda”, lo cría sin problema.
07- Ovejas Montesinas en la exposición de la feria ganadera “Expohuelma”
El objeto de esta
publicación era contar los pormenores de como esquilaban a las 600 ovejas de
Manuel Torres en al tiná del Neveral unos profesionales llegados al efecto. Operación
esta que se hace tradicionalmente a finales de junio antes que apriete el
calor.
Hay que tener cuidado con la fecha que se elija para esta operación, pues puede que aún haga frío y al quitarle a las ovejas el vellón, éstas se pueden resfriar, causándoles la muerte, aunque parezca mentira. P.E.J., la semana pasada en los Campos de Hernán Pelea en las Cumbres de Santiago de la Espada, por las mañanas amanecía a 3º/5ºC, y en los montes del Neveral casi igual.
Antes hemos mencionado que
para el esquilo se personaron en la tiná un equipo de profesionales. Este
equipo o cuadrilla la formaban seis personas, cuatro eran “esquiladores” y dos “arrimadores”.
A éstos últimos en la Sierra de Segura los llaman “ligaores” pues usan un método
diferente de esquilar.
08 - La
cuadrilla del esquilo preparando el campo de trabajo.
El
método australiano de esquilar
Del millar de españoles
dedicados a la esquila de ovejas son pocos los que conocerán de que trata el
método australiano de esquileo. Pues a pesar de la larga tradición que hay en
España en cuanto a producción de lana, realmente el país cuenta con muy pocos
profesionales del esquileo.
¿En
qué consiste este método?
El método consiste en
sentar el animal, mientras que la persona que se encargará de esquilarlo se
ubica detrás de él; posteriormente se comienza a esquilar avanzando por el
pecho o la barriga y termina cortando la lana presente en la cabeza de la
oveja.
Se hace notar que la persona que sienta el animal se le conoce por el “arrimaor”.
10 – El “arrimaor” con la oveja sentada
esperando turno.
La principal
característica que distingue este método del esquileo tradicional español es que
éste no se preocupa en atar las extremidades de los animales para esquilarlos, sino
que sustituye el amarre por ligeros movimientos en los brazos y piernas del
esquilador, que controlan perfectamente al animal.
Se hace notar que la
persona que ata al animal por sus cuatro patas, se le conoce por el “ligaor”.
Ello otorga un sin número
de ventajas que comienzan por mayor rapidez en el esquileo, mejor terminación
de la oveja, obtención del vellón completo que facilita una mejor clasificación
posterior y otras más.
Además de proporcionar
menos repasos al momento de esquilarla, con lo cual se da mayor longitud media
a la fibra y mejor calidad.
¿Cómo
se ajusta el trabajo?
El ganadero ajusta el
precio del esquilo por animal, variando este según las zonas y el número de
animales de la explotación. Evito aquí el precio para no herir
susceptibilidades.
En la foto 10) se observa al “arrimaor” esperando, dos esquiladores en plena faena, y otro “arrimaor” recogiendo el vellón para introducirlo en la saca.
12 – Manuel, el pastor, pendiente de todo.
Y los
esquiladores ¿Cómo se reparte lo acordado al finalizar el trabajo?
Utilizan un sistema muy
curioso. Cada esquilador tiene en su puesto de trabajo un contador manual, que
pulsa cuando terminar de esquilar un animal. Al final de la jornada cada uno
cobra según el número de animales que ha esquilado.
En la tiná, había uno que
era una máquina, llegó a esquilar en la jornada hasta ¡300 animales! de los
603.
Los “arrimaores” están a jornal y quién les paga es el esquilador al que han estado arrimándole las ovejas.
Epílogo
Jaén, 30 de junio 2021
Madre mía Miguel mejor explicado imposible impresionante mi enhorabuena.
ResponderEliminarY los trabajadores un 10 la nota más alta,el que entiende este trabajo sabe lo sacrificado que es y lo poco valorado que asido siempre, un abrazo.
Gracias Franciscas. La verdad que es un trabajo muy duro, además con el problema que la "lana" no la quiere nadie y tienen un problema añadido los guanderos muy complicado. Otro abrazo para ti amiga Francisca.
EliminarHola, Miguel, muy interesante esta entrada donde no solo nos relatas cómo se esquilan las ovejas, un trabajo duro a todas luces, sino que también nos explicas las características de la oveja llamada "Montesina", una raza de la que ya quedan muy pocas según nos cuentas. Como ya te he contado alguna vez, nosotros también tuvimos ovejas en una época determinada y cuando llegaba la época de esquilar, a veces nosotros ejercíamos de "arrimadores". Recuerdo que se esquilaban a la manera española y era un trabajo durísimo. No sé si entre las cuarenta o cincuenta ovejas que teníamos figuraba alguna perteneciente a la raza montesina, creo que alguna había, pero eran sobre todo ovejas de raza "segureña" y algunas merinas. Tu entrada, además de ser una fuente de información impagable, me ha traído recuerdos de una época dura, pero muy bonita. Muchas gracias y un fuerte abrazo mío y de mi hermano.
ResponderEliminarBuenos días Juan Basilio, en primer lugar, gracias por tu comentario. Sobre la raza de vuestras ovejas, no sería de extrañar que fueran “segureñas” o “merinas”, pues estas últimas, que son para lana fundamentalmente, las traían los trashumantes que venían por la “Verea de los Serranos” desde Cuenca y Teruel y finalizaban en tu pueblo, y las “segureñas” los trashumantes de las Sierras de Segura que también pasaban el invierno en vuestra zona. Sobre el esquilo que te voy a decir si lo habéis viviendo en primera persona, además ahora con un problema añadido pues nadie quiere la lana y no saben qué hacer con ella.
EliminarGracias de nuevo y un saludo a tu hermano y para ambos un fuerte abrazo desde Segura de la Sierra.
Cómo se nota que te gusta y te interesa el tema sobre el que escribes, y está afirmación es válida para todas las entradas de tu blog.
ResponderEliminarEn las que escribes sobre puentes, iglesias y arquitectura en general ,lo entiendo y tiene su lógica pues está muy relacionado con tu trabajo, aún así son muy elaboradas y te deben llevar muchas horas por lo que merecen un gran reconocimiento, pero hay amigo, cuando te pones a contar tus vivencias con la tranhumancia ,se te va la mano y se te nota el cariño que pones en ello. Lo explicas cómo si lo estuvieses viviendo en ese momento.
Sabes que me gustaría? Que lo leyeran jóvenes y les transmitieras tu entusiasmo. El oficio de pastor es hermoso, pero poca gente ha sabido verlo, quizá no hemos sabido transmitir a nuestros hijos la dignidad de muchos trabajos y les hemos privado de formas de vida sana y sostenible.
Pero como aún no es tarde para revertir esta situación, vamos a confiar en que los jóvenes se replanteen que ser pastor o agricultor no es menos digno que trabajar en la cadena de montaje de una fábrica,o de funcionario o incluso si me apuras de ministro.
Tu, por tu parte, ya pones tu grano de arena, escribiendo desde el entusiasmo tus vivencias, y lo haces muy bien.
Buenos días amiga Enriqueta. En primer lugar, gracias por tu extenso y cariñoso comentario. En relación a lo que comentas sobre la trashumancia, la verdad sea dicha, a lo largo de casi 5 años he tenido unas experiencias que me han dejado huella, pues las he vivido en primera persona: los caminos, los animales, la divulgación en los medios y en la universidad de este tipo de vida y trabajo… y sobre todo las personas con las que me relacionado, que tienen una sencillez y una calidad humana que para si la quisieran muchos. En fin, esta experiencia está siendo para mí un verdadero regalo. Gracias por todo y un abrazo de tu amigo Miguel.
EliminarJosé Luis Guerrero Rubio. Miguel muy interesante este artículo del Esquilo de las ovejas del Neveral, me ha encantado, gracias por enseñarnos cosas que parecen que no existen tan cerca de la capital. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias José Luis, cuando pases por la tiná, si está Manolo, lo saludas de mi parte y te paras a charlar con él, aprenderás mucho. Un abrazo.
EliminarFrancisco Ariza Aranda. Miguel muy interesante este artículo, como todo lo que haces, cuando yo digo que eres un Krac. Un abrazo Miguelin.
ResponderEliminarGracias Paco y otro abrazo para ti.
EliminarJuan Manuel Arévalo Badía. Genial artículo, Miguel. Me has recordado cuando subía a la Pandera con mi padre a controlar el esquilado de las ovejas que por entonces tenía José Chamorro por esos parajes. Del tórrido veraniego pasabas al fresco que ahí atardecer, era frío. Somos una generación de vivencias que nuestras siguientes no tendrán.
ResponderEliminarQue razón llevas Juan Manuel, eso se lo están perdiendo. Pero es otra época la que le ha tocado vivir. Un abrazo y gracias por el comentario.
EliminarMoreno El Mayor. Gracias, Miguel, por descubrirnos esta especie ovina tan singular como es la oveja Montesina. Menos mal que ha podido evitarse su extinción, uf, solo ¡1300 ejemplares! Extraordinaria labor la de estos animales para la limpieza de los bosques, y entrañable la anónima labor de los pastores. Qué curiosa y singular la profesión del esquilador, y qué sorprendente la actividad del que nos has contado: digno de un premio olímpico. En fin, un artículo muy interesante, de los que ya no se escriben. Un abrazo desde los madriles
ResponderEliminarAmigo Antonio primero gracias por tu cariñoso comentario y lo segundo que no encuentro palabras para contestarte, así que me perdonas. Un fuerte abrazo
EliminarCarmen López Cabrera. Este Miguel nos hace amar este gran oficio, va con su varita y nos deja encantados, la trashumancia, los Carlillos, la sostenibilidad, razas de ovejas…ni puedo contar más.
ResponderEliminarGracias Miguel por tu estudio y sabiduría.
Ah! Y tú generosidad por compartirlo.
Carmen me has puesto colorado-En estudio vale, pero en la sabiduría me quedo en aprendiz. Gracias por tu comentario que da ánimo para seguir en la brecha. Un abrazo.
Eliminar