Desde
el 2 al 13 de diciembre en IFEMA más de
25.000 representantes de 200 países, entre ellos decenas de jefes de Estado y
de Gobierno, organizaciones ambientales, empresarios, científicos, etc. están
reunidos en la Cumbre Mundial del Clima
COP25 con el objetivo de alcanzar acuerdos y compromisos entre naciones
para combatir los efectos del cambio climático.
¿Por qué el título de esta nueva entrada en mi blog?
En
mi página web escribía en el año 2016 refiriéndome a los pastores lo
siguiente:…”Los que ya peinamos canas
hemos oído con frecuencia decir a los mayores, que si no sirves para nada, te
metes a pastor. La Real Academia de la Lengua, define al PASTOR: Persona que
guarda, guía y apacienta el ganado, especialmente el de ovejas. Yo diría más:
persona que tiene más licenciaturas que nadie: en veterinaria, economía,
meteorología, medio ambiente, nutrición, en geología. Además practica el
senderismo y la botánica, sabe de logística y transporte; tiene especial
intuición para diseñar estrategias en el terreno, que sorprendería a un
estratega militar. Es ecologista, no de boquilla como muchos, si no de verdad,
y práctica la solidaridad, más de lo que se cree”…
Y os
podréis preguntar ¿Qué aportan los pastores trashumantes a los efectos del
cambio climático? Bien fácil la respuesta. Con más de 6.000 años conservando
prácticas de manejo tradicional del ganado, su trabajo ha aportado innumerables
beneficios a favor del cambio climático:
En “la verea” propiamente dicha
- El
paso del ganado aumenta la fertilidad de nuestros suelos amenazados por la
desertificación, al incorporar estiércol y otros restos vegetales a su paso.
- Cada
hato de mil ovejas transporta diariamente “cinco millones de semillas” entre
distancias superiores a cien kilómetros, o lo que es lo mismo, desde los Campos
de Hernán Pelea a la dehesa de Sierra Morena.
F1) EL HATO EN LA RIBERA DEL EMBALSE DEL TRANCO CAMINO DE CAÑADA
MORALES
- Como el ganado tarda entre 4 y 5 días en
digerir las semillas y se desplaza a una media de 25 kilómetros diarios, esta
movilidad garantiza a esas especies vegetales su conservación, al encontrar
nichos de adaptación por mucho que cambie el clima.
F2) LAS OVEJAS ENGULLENDO LAS BELLOTAS QUE CAEN AL VAREAR LAS
ENCINAS QUE HAY EN LA CAÑADA AL PASO DEL
HATO.
- El
hecho de que el movimiento de los hatos se haga a pie, permite el ahorro de combustibles fósiles.
En los agostaderos de verano o en la dehesa
- Los
animales se alimentan de materia fácilmente combustible actuando eficazmente en
la lucha contra incendios.
- Los
efectos también son positivos para la flora, al contribuir cada oveja a la
dispersión de más de 5.000 semillas al día, unos cinco millones de semillas por
rebaño.
F3) EL HATO POR EL CAMINO DE SAN JUAN DE LA CRUZ
- También
favorece a la fauna silvestre, sobre todo aves, que depende de los espacios
abiertos pastoreados.
Además
- Este
tipo de ganadería es la más eficiente aprovechando superficies pastables,
consumiendo recursos que no compiten con la alimentación humana, como
rastrojos, hojas de vid o pastos, algo especialmente importante en el contexto
actual de crisis alimentaria. Esto permite a los rebaños ser prácticamente
autosuficientes, no dependiendo su alimentación de piensos importados que –dado
su elevado precio- están poniendo en jaque la rentabilidad de las explotaciones
ganaderas más intensivas.
F4) EL HATO POR EL PUENTE MOCHO SOBRE EL RÍO GUADALIMAR HACIA EL CAMINO DE LOS CARTAGINESES
- Los
rebaños trashumantes benefician directamente a la biodiversidad, al conservar
numerosas razas autóctonas en peligro de desaparición.
- Contribuyen
a la polinización de las plantas y su crecimiento al abonarlas con su
estiércol.
F5) EL HATO AL FINAL DE LA JORNADA LLEGANDO AL CORNICABRAL.
- Por
si eso fuera poco, la ONU en un informe dice que el fomento del pastoreo
extensivo podría ayudar a evitar hasta el 10% de las emisiones de carbono a la
atmósfera.
En resumidas cuentas, la ganadería
extensiva favorece la biodiversidad.
F6) FIN DE LA VEREA: EL APARTADO. LOS MASTINES Y SU PERÍMETRO DE
SEGURIDAD. ¡NO PASAR!
Conclusión
Y con todo ello, encima a
los pastores los ningunea la administración y mucho listo se aprovecha de ellos
¡ah!, Por eso no están presentes en la COP25.
Jaén, 9 de noviembre 2019
Bibliografía:
- Textos, fotos y maquetación:
Miguel Mesa Molinos
- Fuentes: Internet
¡Cuanta razón tienes! Tendrían que tomar nota "nuestros políticos" y aplicarse en compreder que de las tradiciones se aprende. El pastoreo ha sido la salvación de nuestros bosques, limpiaban y así no había incendios. Estas ovejas que no dañan, que lo que "ensucian" es abono; que lo que comen, a nosotros nos sobra; que producen leche, queso...; su lana, abrigo. Los campos quedan limpios a su paso, luego en otoño podemos encontrar hongos por donde ellas pasaron; también, vengo observándolo, en sus veredas salen más variedad de flores debido a ese transporte que tan gentilmente nos hacen. No veo pues nada que contraindique que estos rebaños pasten por nuestros campos, todo es tan positivo como la vida misma, la que nuestros abuelos manejaban a pesar de la precariedad pero con mucha sabiduría, el campo, la ganadería, la agricultura y el hombre, pueden frenar tantas cosas. Solo hay que saber ver y actuar. Un abrazo amigo por esta magnífica enseñanza. Ojalá sea parte de esa asignatura que piensan instaurar en las escuelas, seamos pues más humildes, más personas.
ResponderEliminarAmiga Rosa, no sé que contestaste, tú lo has dicho todo. Gracias por esta reflexión en voz alta. Un abrazo de tu amigo Miguel
Eliminar