¡Primero nos situamos!
En la verea hay un “hito” muy significativo que es el paso del hato por el RÍO NUBLA que en realidad es el Río de la Vega. Este río tiene como afluentes el Cañamares, que veremos al paso del hato cerca del Molino de La Puente, y el río Cerezuelo; a este tramo del Río de la Vega los pastores le llaman “NUBLA”, pues está cerca de la Ermita de Nubla cuyos orígenes, aunque imprecisos, parecen ser del S.XVII, y del Torreón de Nubla, construcción de la segunda mitad del siglo XIII, de la que tan solo quedan los cimientos de una torre del homenaje cuadrada (12 metros de lado), de la que todavía subsiste su muro norte.
F1)
F2)
F1) – F2) TRAZA
DE LA RUTA DE LA VEREA EN A-6201 –
TRAMO: CHILLUEVAR- CAZORLA.
LOS MANSOS
Una vez situados, vemos como la verea trascurre
por lugares que en épocas pasadas tenían importancia tanto religiosa (Ermita de Nubla) como militar (El Castillo de Nubla). En esta zona hay
que vadear el Río de la Vega en un
tramo donde en épocas que hay poco caudal de agua es relativamente fácil, pero como este invierno pasado y en la primavera
ha llovido copiosamente, el cauce presenta un caudal de agua importante, de tal
manera que las ovejas no pasan así como así, dándonos pie para hablar de la
figura de los “mansos”.
¿Que son los MANSOS? Son machos cabrios castrados, a los cuales se les coloca un cencerro, cuya finalidad es hacer de
guías en el rebaño por ser especialmente pacíficos. A la hora de pasar arroyos
o ríos cuando llevan abundante agua, o simplemente salir por un portillo de una
cerca, el pastor los llama con un grito
o un silbido; los mansos que por lo general caminan casi al final, se ponen al
frente del hato, pasando a ser los primeros y llevándose detrás todo el rebaño.
F3)
F4)
F5)
F3-F5) LOS
MANSOS DELANTE DEL HATO A SU LLEGADA AL PUENTE DE LA CERRÁ. JUNTO A ELLOS
DANIEL Y MORO (Curiosamente también los acompañan dos ovejas)
Los Carlillos se sienten, al igual que la mayoría de los
pastores trashumantes, muy orgullosos de sus mansos; ellos tienen seis
ejemplares de colores variopintos con el fin que se les vean bien en el hato. Los
eligen cuando son chotos; el criterio: su experiencia y olfato de pastor. Desde
pequeñillos los educan para que vayan delante del hato “regañándoles” como se
suele decir, y acompañando a los mansos mayores de los que van aprendiendo, al
igual que los careas. Este año “Roqui”, un perro de 9 meses Collie, era la
sombra de Moro del que aprendía su trabajo; me decía Daniel que ahora en los
Campos lo separaba para que haga su trabajo sin necesidad de tener a Moro a su
lado. La verdad que ha tenido un maestro de primera especial ¡Moro es mi
debilidad!
EL VADO DEL RÍO DE LA VEGA
Ya hemos visto la importancia de los mansos. Las ovejas, y
eso lo he vivido en primera fila, cuando ven un simple charco de agua no lo
pisan y menos lo atraviesan “ni por casualidad”. En las dos imágenes siguientes
se puede comprobar lo que digo.
F6)
F7)
Si no son capaces de pasar un charco ¿cómo vadearán un río?. Esa pregunta me la hacía
llegando muy de mañana desde los Portillos al paraje de Nubla, donde había que atravesar el Río de la Vega
que este año bajaba con bastante caudal. Al llegar a la ribera el hato se paró
en seco delante del agua.
F8) EL HATO EN LA RIBERA DE RÍO, AL FONDO SE
PUEDE OBSERVAR A LOS MANSOS
F9) JOSE CARLOS
CON SU INSEPARABLE “TINA”, OBSERVANDO AL
HATO Y PENSADO LA MANIOBRA CON EL RESTO DE SUS HERMANOS
Al final y
mediante una maniobra digna de un estratega militar, y tras situar a los mansos al frente del hato, después de
varios intentos, las ovejas vadearon el río pasando a la otra orilla. En el vídeo se observa toda la maniobra. Yo me encontraba situado estratégicamente
detrás de unos matorrales para que no me vieran las ovejas y así no estorbar.
Lo mejor el final. Por cierto al choto ya le han echado el ojo para futuro
manso, su aptitud y valentía así lo demuestran.
F10)
F11)
F10- F11)) AL
FINAL EL HATO PASÓ EL RÍO Y ESPERABA PACIENTEMENTE LA LLEGADA DE LA GUARDIA
CIVIL PARA SEGUIR CAMINO POR LA CARRETERA HACIA EL SESTERO DEL MOLINO DE LA
PUENTE.
Jaén, 11 de junio de 2018
Cuando acabes con toda la crónica de la "verea" podremos decir que somos alumnos de esta "Universidad a distancia" de la cual tu eres el maestro. Me ha encantado lo de que las ovejas no se mojan, ahora entiendo a mi perro que hace exáctamente lo mismo. Un saludo.
ResponderEliminarBuenos días Rosa, tampoco hay que exagerar en lo de maestro; veremos cómo sale todo al final, no obstante gracias por tu comentario.
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