Noticia: ¡el puente Mocho se rehabilita! (no te lo crees ni tú).
F1) Vista del tramo medieval del puente Mocho, aguas arriba.
Se
anuncian en el horizonte las elecciones, da
igual que sean nacionales, autonómicas o municipales, y al momento reaparece la
noticia de la “inminente” reparación del
puente Mocho. Esta vez, ¡estamos salvados!, el mismísimo Consejero D. José Fiscal López, a
pregunta del diputado por Jaén don Julio Millán del PSOE, ha comprometido en el
Parlamento Andaluz una rehabilitación integral del puente por valor de 326.000 €
(artículo Ideal 2.05.16).
Es
la misma historia de siempre, eso sí, sin foto de políticos con chalecos y
cascos en la ribera del río Guadalimar con la panorámica de fondo del puente
Mocho, como hace justo ahora un año,
cuando se celebraron las elecciones municipales (informe IV 28.5.2015); luego ya sabemos: “si te he visto, no me
acuerdo” (si alguien tiene la curiosidad de ver el proceso, que lea los
informes de la entrada “mocho” en mi blog: EL Chilanco Elias).
Me
apuesto públicamente con el parlamentario D. Julio Millán, por cierto amigo mío,
a una comida en el bar “El Cortijo” en Pontones, a base de “potaje de judías
pintas con morcilla y níscalos” de
primer plato, más unas “chuletas de cordero segureño” de segundo, y de postre “pan
pastor”, a que llega el mes de noviembre de este año y no se ha iniciado la
obra, y lo más probable, que ni tan siquiera esté adjudicada.
¿Por qué el mes de noviembre? Porque es la época
en que de nuevo las ovejas de la trashumancia regresan de los Campos de Hernán Pelea
a Sierra Morena y pasarán con mil fatigas por el deteriorado tablero del puente;
pero si desde el siglo II no se ha caído, ¿lo va hacer ahora?
Seguiré
informando, aunque sea por la emoción de estar en el tablero del puente y
pensar que por allí paso la Santa Madre Teresa de Jesús, camino de su fundación
en Beas, o Don Rodrigo Manrique, padre de Jorge Manrique, desde su casa de Segura de la Sierra a su castillo de Montizón, o Quevedo, cuando iba a ver a su amante Belisa en Segura, o los rebaños de ovejas en la época de la trashumancia, conducidos por los
pastores y ayudados de sus perros careas.
F2) Vista del Castillo de Montizón en Villamanrique (C.Real)
En fin, espero perder la apuesta y que ¡sea lo que Dios quiera!
PD. También se hace extensiva la invitación al Sr. Consejero
para que pruebe la comida serrana, y le aseguro que no quedara defraudado.
Jaén, 25 de Mayo del 2016
- Fotos, textos y maquetación: Miguel Mesa Molinos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario