Cuando he finalizado “mis vereas de primavera” en años anteriores, he ido publicando en mi blog, en mi página web, o en mi muro de Facebook las experiencias que fui viviendo. Este año en mi última publicación hablé sobre la ruta inédita que los “Carlillos” abrieron en las cumbres de Cazorla:↳↳↳ HISTORIA DE UNA RUTA PIONERA: LOS CAMINOS DE PIEDRA EN LA VEREA DE “ARRIBA”. Continuando con mi experiencia vivida he podido tomar imágenes, dentro de mis escasos conocimientos de reportero gráfico, del paso del hato por el “agua”, en concreto del río Guadalimar por el puente Ariza, el Guadalquivir por el puente de La Cerrá, el río de La Vega por el "Vado Palomo", el río Cañamares por el puente romano de Nubla y de nuevo el Guadalquivir, en Arroyo Frío.
- El inicio de la verea. Salida del hato en la dehesa de Sierra Morena camino de las cumbres de Santiago
El pasado año publicaba: ↳↳↳ EL
PRINCIPIO DE LA ”VEREA DE PRIMAVERA” Y LA DESPEDÍA y entre otras cosas escribía:.. “Un día antes de la partida. Me decía Félix que las ovejas cuando llega el tiempo,
tanto en invierno como en la primavera, se ponen muy nerviosas, pues quieren
irse lo antes posible, o a la Dehesa o a Los Campos” y os dejaba un video de
la salida de uno de los hatos de la tiná para comenzar la verea, en el que las
ovejas parecen “gacelas” saltando de alegría. Este año de nuevo os dejo un
enlace a mi canal de YouTube donde se repite la misma escena.
F2)
F1- F2) Inicio de la verea de arriba en la dehesa de Sierra Morena
- El cruce del río Guadalimar por el puente renacentista de Andrés de Vandelvira: El puente Ariza
El
segundo día de verea nos encontramos con el embalse del Giribaile y en él con
un monumento renacentista espectacular: El puente Ariza. Fue una obra maestra
de Andrés de Vandelvira; su tercera obra de ingeniería civil que hizo en nuestra
provincia. La acometió después de proyectar y dirigir el puente sobre el río
Guadalén en al camino de Siles a Montiel, y el puente Mazuecos sobre el río Guadalquivir
(aún hoy soporta paso de camiones de hasta 30 TM de carga), próximo a Jimena en
el camino de Granada a Baeza.
F3)
F4)
F3 y F4) Paso del hato por el río Guadalimar sobre el puente Ariza
Es
espectacular ver el paso de un hato de 2.100 ovejas de raza segureña, junto a
los mansos cabríos, las cabras, los perros careas y los mastines.
Al
paso del puente los animales “huelen” el agua y tratan de irse hacia la ribera.
En una maniobra de gran maestría, Domingo, consigue reconducir el hato hacia el
camino. En un descuido, si las primeras ovejas hubiesen llegado a la ribera, se
hubieran hundido, las de atrás saltarían encima de ellas y así sucesivamente,
pereciendo más de la mitad del ganado.
- El paso del Guadalquivir por el puente de La Cerrá y el agostadero de los animales
El tercer
día nos encontramos por vez primera con el río Guadalquivir. Se atraviesa por
la coronación de la presa de La Cerrá. Justo a la salida de las compuertas del
embalse, la ribera del río está muy consolidada y los animales pueden beber
agua sin problema y además el entorno les sirve de agostadero, pues aún queda la
etapa de la tarde que es larga, polvorienta y muy calurosa hasta llegar a los
Portillos, después de atravesar el Molar y el cortijo de las Arcas.
F5) Agostadero en la ribera del Guadalquivir en el puente de La Cerrá
- El paso del río de La Vega por el "Vado Palomo"
El
cuarto día nos encontramos de nuevo el paso de un río, esta vez hay que
vadearlo por el paraje denominado “El Vado Palomo” en el río de La Vega. Para
el paso del río se pone a prueba la maestría de los Carlillos manejando a sus
“mansos cabríos”. Sin la ayuda de estos, lo tienen difícil las ovejas para
cruzar el caudal.
F6) Vado Palomo en el río de La Vega
- El paso del río Cañamares por el puente romano de Nubla
El
calor del mediodía, una vez que cruzamos el Vado Palomo, lo pasamos en el
paraje de Nubla sesteando con el hato, en concreto en las inmediaciones del
cortijo de la Puente, justo antes de cruzar el río Cañamares por el puente
romano de un solo arco de medio punto. La contemplación del puente sirve de modelo, a mi entender, para enseñar de
una forma clara las partes que forman el “puente romano”: La clave,
las dovelas, el trasdós, el intradós…
Debajo
del arco, el río forma un “chilanco” que
los pastores después de cuatro días de marcha agradecen para asearse, incluido
el que suscribe; el agua está un poco fría, por no decir una picardía, pero se aguanta ¡chapuzón y a la calle!
- El paso del río Guadalquivir por el paraje de Arroyo Frío
Ya
estamos llegando a nuestro destino, queda tan solo una etapa, aunque el tramo
de la tarde hasta subir desde Arroyo Frío hasta el puente Guarnillos, o como
dicen los de mi pueblo ¡manda hue…!
La
ventaja es que aquí ya estamos en la sierra y los animales lo saben. Ya ha
quedado atrás la hierba seca de la dehesa, el caminar por los olivares, el
erial de los trigales ya secos… No hay
nada más que ver a los animales en las cristalinas aguas de nuestro río ¡El Guadalquivir! muy próximo a
su nacimiento.
- Epílogo
Ya
hemos llegado al final de la verea de primavera o cómo dicen los Carlillos la “verea
de arriba”. Doy gracias a Dios y a la Milagrosa de la Matea que todos hemos
llegado bien. No se nos ha perdido ningún animal y las fuerzas tampoco nos han
abandonado. Ahora queda la paridera, el agostadero en los Campos… ¡Ah! Se
me olvidaba: ¡Las fiestas de la Matea!
casi ná, para perdérselas…
Me
despido hasta noviembre en la “verea de abajo” si Dios da, y mis jefes me admiten de nuevo.
En Jaén, a 24 de
junio del 2019
Miguel, da gusto leerte!! Y ahora más que he tenido la oportunidad de vivirlo..ojalá haya otra oportunidad en la verea de abajo...
ResponderEliminarMiguel, da gusto leerte!! Y más que ahora he tenido la oportunidad de vivirlo..y ojalá tengamos otra oportunidad en la verea de abajo!!
ResponderEliminarNoviembre está ya mismo aquí. Gracias por tu comentario. Un saludo
EliminarSiempre es muy grato seguir tus narraciones y disfrutar de las vereas de primavera. Enhorabuena maestro y amigo.
ResponderEliminarMuchas gracias Ángel.
EliminarGracias por tus conocimientos, nos enriquece cada día un poquito más sobre estas costumbres de nuestros antepasados.
ResponderEliminarGracias por tu comentario Miguel!!!
EliminarExcelentes relatos y maravillosas verdad, con todo esto recordamos la gran riqueza que tenemos en nuestras sierras, además se da a conocer el trabajo y oficio de nuestros antepasados. Gracias Miguel
ResponderEliminarGracias a ti Carmen por tu comentario. Seguiremos en la brecha. Un saludo.
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